Presente

Hace días

que un temblor me recorre sigiloso

desde adentro

y el frío-vacío-pena-languidez

de celdas y barrotes,

amenaza mis alas

y mis sueños.

 

Es otoño en primavera,

las calles se desgranan

como puentes de arena

ante mis pasos

y los tuyos todos nuestros ninguno.

 

Miro sin luz, la vida

desde un témpano

a la deriva amarga

de una pena

comprada vendida muerta sepultada

de cemento, sangre

y desnudez.

 

Hace días

que un rumor me circunda, cauteloso

desde adentro

y acorrala

con grillos y cadenas

la insensata razón

de imaginar…. Y resistir.

 

 

rojAmhieL

 

 

 

entonces...

me refugio otra vez en las palabras...

 

"Hay que aprender a resistir. Ni a irse ni a quedarse. A resistir, aunque es seguro que habrá más penas que olvido..."

 

Juan Gelman

per la llibertat d'expresió

 Querida gente,

ante amenazas muy graves, es necesario el apoyo, firma y difusión

 

 

                          http://www.poesiasalvaje.com

                                                                                                         

 

No

Otra vez el temor

de cerrar puertas y ventanas

de esconder en un pozo

las palabras

y enterrar en el barro

una verdad

 

Por qué…

alimentar a los perros de la noche

con tus sueños,

la luz y el cielo nuevo,

nuestro

de horizonte y hermandad…?

 

Amenaza el terror

de negar rostros y señales,

de enfundar en olvidos

los colores

y esposar las palomas

de la paz

 

Por qué…

abandonar estas calles y las horas,

zigzaguear

los pasos de la luna

y apagar nuestro instante

de ilusión y dignidad…?

 

No.

Nadie.

Nunca más.

 

Somos viento.

Somos lluvia

gota

gota

gota

de semilla, flor y fruto…

 

Libertad!

 

rojAmhieL

PS  . El dibujo es de Pedrak Molakis

percepciones

Te escucho…

cuando grita la tarde

y la ciudad esparce sus sirenas,

cuando amaina la noche

en la tumba abierta de un lucero

y cuando enciende la vida,

lumbre roja, cada día un sol.

 

Nadie más

dice mi nombre letra a letra,

apoderándose los labios

de las curvas, los sonidos y la piel

que esconde la sombra y los barrotes,

prisionera ilusión desentrañada

de tus manos

regándome en secreto,

como cardos silvestres del otoño.

 

Te escucho…

aunque no puedo verte

y se deshacen las horas, en mis tiempos de arena,

cuando crecen las aguas

de tormenta marina agigantando horizontes

y cuando estrecho mis alas

empapadas de bruma y pedacitos de vos.

 

Nadie más

bebe y sangra mi nombre letra a letra,

destilando los hilos

transparentes, de la trama

que desviste solitaria

la sed y la codicia

de un amor que orada

entre murmullos,

el tiempo, la razón y la distancia.

 

Te escucho…

cuando laten mis venas,

aunque apagues el aire,

aunque selles tu boca

 

Te escucho…

remover el río de mi nombre

y naufragar en la orilla serpenteante,

de tu voz

 

Aunque no digas nada

nunca… más

yo…

 

Te escucho

 

rojAmhieL

otra vez...

No puedo pensar
No puedo pensar
No puedo pensar

tengo el alma en un puño,
remolino de viento

y un deseo furioso…
de volar

con mis alas rotas

de mhieL

quan eros parla en català

“estic boja”… jo lo sap,
i non puc oblidar-te,
tinc… com lliures ocells,
creixent, les teves paraules
més endíns
que el meu cor dolent

mentre cauen les fulles de les parpelles

i tu: en el fosc
lluny …
necessito el mapa de la teva pell,
el camí de les teves panteixos,
les teves mans,
el teu pit calent … al trot del cavall

com llum i vent i aigua

“estic seca”… jo lo sap,
passen les hores fugaces
i desitjo l’ombra de la nit,
la humitat de la pluja
suau i perfumat
de les teves gotes blanques

mentre cauen les fulles de les parpelles

i tu : en la boira
lluny…
necessito assaborir
el grós de teus llavis,
obrint-se en la meva boca
i les teves dents, en un petó sucós

com llum i vent i aigua

”estic sola”… jo lo sap,
espero que cridis meu nome
en cada sospir que estarrufa el cel,
al pas de les dits… teves dits,
mullados, d’amor

mentre cauen les fulles de les parpelles

i tu : en el silenci …
lluny…
pero,
fin que tu tremolis,
fin que jo desperti,
vull sentir-te un sol, furiós
entre les meves cames…

com llum i vent i aigua…

mhieL

PS. el dibujo es de Laura Saad

Diumenge

si existiera
la hora del desgarro
sería ya
aquí
este segundo

cuando el sol
se descuelga de balcones
y sonríe la agonía
detrás de un paredón

si existiera
la hora de la ausencia
sería aquí
ya
este momento

cuando el halo rugoso
de la luna
ensaya un guiño compasivo
siempre lejos, del amor

si existiera
la hora del olvido
sería nunca
nada
ni un instante

porque truena
el universo entre mis manos
cada vez que despierta algún suspiro
la memoria, titilante

sembrada de la sed
sobre tu voz

...

domingo ... silencio ... ensoñación

mhieL

cuerpo, horas, alma

A veces…
soy horas sin alma

Mi soledad
huele a llovizna
y a campos regados
de misterio

soy jornales de cosecha
clandestina
y reflejos hambreados
de color

A veces…
soy alma sin cuerpo

Y esos días
soy la muerte
encallada en la entrepierna
del deseo

una guadaña,
hoz de luna
y menguante brillantez
de algún recuerdo

A veces…
soy cuerpo sin horas

Mi desnudez
sabe a semilla
y a manzana maldita
del edén

soy la siesta dormida
de las hojas
y el temblor turbulento
entre los pies

A veces
sencillamente…

soy

 

rojamhieL

 

 

AlegríaS

La alegrìa...
ser incorpòreo
nos visita algunas veces

cuando la invitamos
a nuestros sentimientos
nos felicita por lo que hacemos
bien

cuando viene
todo nos parece mejor que antes

dragòn con cola de colores
árbol hasta las nubes
pared de fuego

asì te veo, alegría

como canto de pàjaros
olor a lluvia
alas verdes

de la imaginación...
dormida

keL

Ps/
Hoy he robado, porque son SUS palabras y son SUS trazos de color, sombra, idea.

porque...

K dice que no escribe, pero escribe
dice que no pinta, pero pinta
dice que no sueña, pero sueña

y mientras discutimos, la vida se nos pasa
y late en el recuerdo ese abismo agridulce
de alguna etérea nota

de alegría

rojA

for export

Ídolos impresos en banderas.
y en remeras.
y en camperas.
revolución en figuritas.

Alej

::: ::: ::: ::: ::: ::: ::: :::

Cuando la mentira despabila golondrinas,
poco importa el orden de las cosas.

Llueve polvo
y hiela dinamita

gime el mundo en un pañuelo
lágrimas secas
de petróleo y corazón

anida la noche
en ciegas tumbas de cemento

y migra al olvido la revuelta:
primavera alada
en mas espinas.

Rueda sangre en una gota y calla…
la promesa furtiva, de otra vida

estampada
en las luces … y el neón…

rOjA

metamorfosis global

sirenal

Suelta…
el puño estremecido,
mil estrellas
de lata y tornasoles

en escamas punzantes
de la noche,

un mar oscuro
entregado entre bramidos…
bebe otoños,
cuece espuma,
sangra sueños

como canto
convidado, de sirena
de estertores febriles y susurros

en el ruedo varado…
del amor

‘’’
constelaciones

de miel y hieL

PS. El dibujo es de Laura Saad

ImAgOs de septiembre

negro...

terciopelo caudal
de latitudes

un capullo
de seda y lava
envuelve el contorno
de mi espíritu inquieto

angosta el suspiro
la trama,
en los brazos
serenos del recuerdo

tórrido núcleo
esperando el trueno

un color
una orilla
un verso

otra vez
ser luna
dilatada en un vaso

un río de vertiente
labio a labio

y caer...

del abismo a la nada
de la nada a algún cielo

encendido de
rabia
rojo
fuego

sentir la locura
mariposa en celo

el rumor esquivo
en alas de metáfora

despertar de cero
y volver...

a creer

...

mhieL

landscapes

Tengo arena en los ojos,
granos secos de recuerdo
que deshojan
mis silencios

y un páramo inquieto
de palabras
que se mueren,
desnudas del compás
de este momento

Me veo en el umbral,
como esa sombra
condenada al diluvio
de otro otoño

aquí… mi septiembre
que florece de miserias
y jazmines

se desliza en vertiente
de deshielo

transparente y punzante
en las pupilas persistentes,
peregrinas…
del reloj

mhieL

vereda y gris

Salí un rato a caminar.... y hace frío
Apenas se destiñe un solcito sin ganas desde atrás de las nubes. Mejor. Porque las veredas conversan animosas cuando la luz no les hiere las nervaduras de cemento. Escuchan mis temores y yo, les contemplo sin rencores, los rezos

Calle, tras calle, tras calle...
Mi barrio es siempre el mismo. Pero me siento extraña en los brazos del silencio.

Arrastro las huellas sin sombra y espero como un faro en cada esquina. Un rumor. El sonido. La marea que no llega y el muelle de mis manos... entrelaza mil secretos, sin testigos.

Las baldosas se quejan rutinarias. Ya se saben de memoria el color de mi rocío.
Cabe el mundo en una gota, cada siesta y cada gris.

Y qué poco importa dónde... cuándo... cómo....
Si el cielo desteje golondrinas... cada vez que te pienso ... o te apareces... como un sueño despierto, de mi piel...

rOjAmhieL

andén: ADN

Todo el día… hoy
tuve sed de esos juegos
que se trenzan en hebras
de adn e infancia

mis pies
caminando la historia
que descubre senderos
y dibujan los pasos

sin descanso
ni temor a las sombras

como un cuento
de misterio entreabierto
y recorridas de invierno
por los parques de nadie
y domingos de ayer

Todavía … hoy
tengo sed de esos sueños
que entrecruzan la vida
como rieles de fuego
y estaciones sin prisa

ni rumbos
ni horarios
ni tren
…

rojamhieL

PS... Piromaníacos, sugiero visitar la web de Eagle Feather... una joya de fuego

El baúl de las fotos

Lulú se estiró buscando la manija para cerrar, pero a mitad de camino, Mele le hizo señas de que esperara. Sacó y empuñó la linterna, con el pulgar justo encima de la perilla de encendido y dejó que, con la seguridad de la luz entre las manos, el ropero se llenara de oscuridad...

Fue el segundo más largo de la historia. Entre cerrar la puerta, comprobar que no había fosforescencias verdes y hacer CLIC en el botón rojo, para prender la linterna... La aureola de luz blanca, rebotaba en los estantes con ropa, o se estrellaba en las caras, pasando de dueña a dueña en una competencia absurda por ver quién encontraba antes, cualquier objeto sospechoso.

“¡Dámela a mí!”
“¡No, yo alumbro mejor!”
“¡No me enfoques a los ojos!”
“¡Mejor apagala!”
Y entre tirones y repartijas, la linterna salió volando y cayó adentro de la caja de cuero donde se guardaban todas las fotos de la familia.

Era raro, porque generalmente, ese cofre estaba en lo más alto del ropero, y bien trabado, con esa palanquita de metal que hacía un TRAK intenso al abrirla o cerrarla. Y esa tarde, ni estaba arriba, ni estaba cerrada...estaba ahí atrás de las almohadas con olor a almidón, como si alguien se hubiera olvidado de acomodarla.

Sea como fuese, terminó con la discusión. Porque era muy interesante revisar esos paisajes de lugares lejanos, de montañas y casas de piedra, y adivinar los nombres de esos parientes que ninguna de las dos había visto ni vería jamás.

Las hermanas se entretuvieron revisando caras en blanco y negro y marrón, que hacían desfilar bajo la luz difusa de la linterna. Sabían de memoria algunos nombres. Otros había que descifrarlos de las letras enruladas que escribían dedicatorias, o saludos, o fechas...

mhieL de antaño

Los Abuelos de Asturies

infancias

Una diminuta lucecita de luciérnaga, brilló en la cerradura del ropero. En cualquier otro momento del día, nadie se hubiera dado cuenta, pero estaba anocheciendo y muy pocos reflejos de sol entraban ya por la ventana del dormitorio.

Lulú dejó de hacer bailar a las agujas de tejer de la abuela y se bajó de la cama con los ojos fijos en la puerta del armario. Estaba segura de ver una luz verdosa. Agarró fuerte el brazo de su hermana y lo zamarreó, haciéndola tirar los collares que se probaba cada fin de semana, cuando revolvía en el cofre plateado de patitas elegantes.

Mele se enojó y chilló con voz de hermana mayor, pero se quedó muda cuando el dedo de Lulú, le señaló el brillo misterioso. Sin decirse nada, caminaron muy juntas hacia el placard alto, de puertas oscuras, metido en la pared. Dos manos tocaron el picaporte y tiraron hacia fuera. Estaba cerrado.Mele giró una y otra vez la llavecita de hierro y entonces sí, el armario se abrió. Y en el mismo instante en que la poca luz que quedaba del día lo invadió, el verde fosforescente desaparecía.

Los ojos de aceituna de Lulú, miraron los grises de su hermana.”¿Cómo puede ser?”, pensó en voz alta y cerró la puerta de madera. Ahí estaban: las chispitas brillantes en la cerradura... Quiso pegar las pupilas al agujero y espiar, pero los dedos de Mele la agarraron de una trenza y la apartaron.
“No”, le dijo seria. “Ya te lastimaste un ojo, tratando de sacar piedras preciosas de la pared, con un caño...¿Mirá si te quemás?”.

...

Hay días en que me siento como entonces
y me refugio en ellos
que todavía tienen ganas de soñar...

con sapos de estanque...

PS. El bichito es de Laura Saad

bautismos

Cuando no puedo escribir...
surgen las aguas
sinuosas de los sueños

polvareda
en cascada serena
y desenfado,

una batalla
librada en letanía
de paisaje, que funde
los destierros

y distancia, recorrida
en un suspiro

como aureola pedregosa
en mi bautismo

de herejía

y soledad
...

rojA

pensa miento

Pensar…
te
me
nos

y ya no puedo,

se engangrenan una a una
las ideas
como heridas raspándome
la hiel

de la boca un beso,
olvidado
un otoño en esta orilla

se ensordecen una a una
las palabras
de un abrazo partido
en la distancia

y es tormenta de arena
mi garganta,
muriéndose de sed

Pensar…
nos
te
me

ya no puedo
y me derrumba el olvido
dibujado,

una noche
a cuentagotas, esperada…

sin beber

miel y hieL

franja-muro-piedra-nada

Alojo
desalojo

de un mañana
pasado
de rodillas

el futuro
presente

en una piedra
partida
y golpe seco

al corazón

un muro
entre la arena

lingotes
de odio rubio
y la conquista

acaudalada

de miseria
genocidio
exterminio

y en el puño…
sin escudos

el terror

rojA