enseñanzas del zorro

Habíamos estado leyendo varios fragmentos de la obra y me pidieron ver la película. La bibliotecaria de la escuela hizo su búsqueda y consiguió una versión antigua pero bien hecha, así que esta tarde nos sentamos debajo de los ventiladores a disfrutar.

El Principito se adueñó de las caras de asombro y llenó de mil interrogantes los ojos chispeantes de risa y de lágrimas.

-¿A vos que parte te gusta más, mheL?- me preguntaron en algún momento.
-El capítulo del zorro- les dije sin dudar un segundo. Y me acordé de esos cuadritos que tenía en mi habitación infantil, con las mejores frases de todo el libro… Esas que el zorro le deja de regalo a su amigo niño.

“Eres responsable de aquello que has domesticado”… “El tiempo que has dedicado a tu rosa, hace que tu rosa sea tan importante”…“No se ve bien, sino con el corazón”… “Lo esencial es invisible a los ojos”

Un manantial de enseñanza.
Un río… que se secó de pronto cuando llegué a mi casa y una voz en el teléfono me revolvió la memoria hasta centrifugar lo poco que tenía de paz.

La mujer de mi ex estaba sacudida. Ella y él habían abordado a un hogar vacío. Antú, el perro, el consentido, un alaskan malamute de más de cincuenta kilos se había esfumado sin dejar rastros, aparentemente… ayer.

-Los vecinos dijeron que lo aplastó el 96… Nadie pudo hacer nada… La mamá de Ale no está y tampoco sabemos dónde buscarla…-

Me dolió el alma. Porque la anciana tiene ochenta años y una carga bien negra en la trama secreta de la vida del hijo. Porque estoy segura de que salió a refugiarse a algún reparo hasta que pase y arrase la tormenta. Porque me la imagino agazapada y sola y triste como el principito queriendo volver a su Asteroide…

Me dolió el alma. Porque lo llamé a decir algo y solo pude oirlo hablar de tripas y ruedas y necesidades inconclusas de palpar la muerte para poder quizás entenderla… Y me dio tanta pena escucharlo llorar como a un chico….
Porque nunca podrá despedirse de su zorro

Y tal vez ya nunca quiera reconciliarse con su rosa


Perdón… lamento tanto, que ésta sea una historia real !
Cuando se me acaben las lágrimas, tal vez busque otro final.

mheL